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El motivo de esta nueva entrada, son una serie de circunstancias sucedidas en los últimos días, que ahora referimos:

  1. Se trata del caso de un trabajador, valorado por este médico, y considerado, que por las lesiones secundarias, a su actividad laboral, no estaba en condiciones de realizar su trabajo habitual. En consecuencia recomendábamos un cambio de su actual puesto de trabajo, a otro en la misma empresa, para el cuál estuviera capacitado. De nuestras recomendaciones, la empresa, hizo caso omiso. Un año después, tuvimos que darle NO APTO, y a raíz de ello es cuando la empresa le cambia a otro puesto, pero no con las funciones normales, y si añadiendo otras, lo que ha originado aumento de las lesiones a otras articulaciones. El caso esta ahora en los Tribunales.
  2. El siguiente caso, es el de un trabajador, perfectamente controlado por sus médicos con medicación, que de forma propia, decide no tomar la medicación, y así nos lo manifiesta. Dado que el trabajador con estas anomalías no esta capacitado para su trabajo habitual (conductor Autobús), le hemos dado NO APTO.

Se han expuesto dos casos los cuales se producen, o repiten con cierta frecuencia. En uno de ellos, las Empresas, no aceptan los dictámenes médicos, y por ello mantiene la situación del trabajador, de todo ello se derivan lesiones de mayor calado. ¿Cuál es el motivo?
En mi opinión la falta de AUTORIDAD, que tenemos los médicos adscritos a Servicios de prevención, en estos temas, la falta de un registro autonómico, la obligación de comunicar estos hechos a la Autoridad, para que inicie un procedimiento inspector. ¿Qué hacemos los médicos? NADA ¿Por qué? La empresa abandonaría el Servicio, disminuirían los clientes, y por tanto los miembros de la Unidad Básica, seriamos despedidos. Siempre existen Servicios más complacientes que toleran estas circunstancias.

El segundo caso, es el trabajador, el que no tiene ninguna confianza en las Recomendaciones que se hacen, “total es el medico de la Empresa”, “que sabrá este, si yo me encuentro bien”, podíamos seguir indicando respuestas, que personalmente he oído entre compañeros de la Empresa, o en bares próximos.

En la actual situación económica, todos estos aspectos, son más complejos.

Lo anterior es solo un comentario escrito, a los pensamientos de un médico del trabajo, que ve como existe una falta de confianza, en nuestros servicios y un concepto de Empresas y trabajadores, de hacerlo como una Obligación, y no con perspectiva de ganar en salud, tal y como hemos mencionado en anteriores artículos.

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